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AVISO

-SE ALZA DE LAS TUMBAS, LUEGO DE 5 AÑOS DE UNA INEXPLICABLE DESAPARICIÓN-

Ya nadie está usando los blogs de fic. Incluso creo que nadie sigue activo con la lectura de los blogs. Y aunque hubiera gente que siguiese en el trabajo de la lectura de fanfics, siento que pronto se terminará eso. No lo sé, lo presiento. 

Desde hace tiempo que no veo ningún movimiento. Todos se han mudado de plataformas y la vida sigue avanzando.

Pero no, al menos no para esta idiota que sigue amando a sus fanfics y que se ha propuesto a terminarlos.

Han sido 5 largos años de infructuoso progreso, de intentos fallidos por continuar y de pocas ganas de regresar debido a los deberes. Pero ahora que ha conseguido finalmente un respiro, comenzará a escribir de nuevo.

Que creen, la tonta ha vuelto. 

Si alguien aún esta vivo por aquí, entonces mis más sinceras gratitudes(?) por continuar esperando esto. Y solo por si acaso, las cosas comenzarán a fluir desde mañana. 

Comenzaré cambiando algunas cosas del blog, Algunas historias las reescribiré y las volveré a subir. Otras se quedarán así para el deseo de ustedes. Y finalmente, iré colocando más cosas interesantes por aquí. 

Sigan disfrutando de su vida. 

Comienzo a adorarles como no tienen idea. 

(= *)7 byebyAtashi!

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CAPÍTULO 1: “ENCUENTROS FORTUITOS” (2 parte) Eran ya las pasadas 3 de la mañana, el pequeño vampiro no conseguía conciliar el sueño, esto no solía pasarle seguido, no era normal que no pudiese dormir a tales horas de la noche. Sabía que algo no concordaba, el lugar estaba bastante silencioso, ni siquiera sus compañeros de habitación hacían el menor ruido... algo no cuadraba... Se levantó para intentar despejarse un poco. Con suma paciencia, se dirigió a la ventana, sintiendo sus pasos ligeros, como si flotase en una especie de nube invisible y trasparente, la noche se tornaba entonces aun más rara. Llegó hasta donde la pequeña ventana dejaba pasar los rayos azulados de la luna de verano, abriéndola con suma delicadeza para hacer el menor ruido posible, y una vez abierta, apoyarse sobre el marco de ésta, relajándose, acomodando su cabeza sobre sus brazos ya cruzados, viendo el vasto bosque que se extendía dentro del internado, siendo interrumpida su visión al ver movilización e