Bueno mis pequeñas!! Ya se que me tardo bastante pero por eso esta vez las recompenso con esta continuación un tanto larga!! Espero les guste...
En lo personal, me va a gustar escribir esta parte *A*!!! God!!! Las cosas se ponen cada vez más interesantes!!!!
Si han seguido el fic y no han perdido el hilo de la historia, se darán cuenta de ciertos aspectos importantes.... *w*!!!!!
Bueno!! Ya basta de tonteras!! jajaja
Douzou!!!
Pd: Amo sus notitas aunque no las responda... dejen notitas *w* <3
En lo personal, me va a gustar escribir esta parte *A*!!! God!!! Las cosas se ponen cada vez más interesantes!!!!
Si han seguido el fic y no han perdido el hilo de la historia, se darán cuenta de ciertos aspectos importantes.... *w*!!!!!
Bueno!! Ya basta de tonteras!! jajaja
Douzou!!!
Pd: Amo sus notitas aunque no las responda... dejen notitas *w* <3
Capítulo 4: “Arena de guerra, festín de bestias” [Parte II]
El cuerpo
permanecía inmóvil. Por más que sus ojos estuviesen abiertos, contemplando lo
que parecía ser aquel cielo rojizo ya por la hora que estaba siendo. Sus
párpados pesadamente reaccionaban y se resistían a ser abiertos, pero si no
obligaba a su cuerpo a moverse, nunca hubiese sabido en la clase de peligro en
la cual estaba.
--------
Sus pasos
veloces avanzaban furiosos por los pasillos del instituto. Pasos nerviosos
pocas veces dados le seguían de cerca. Las sombras avanzaban por los enormes
ventanales laterales que adornaban la pared del lado derecho, y finalmente se
detuvieron frente a una enorme puerta de cedro finamente tallada con grandes coronas
que representaban enteramente la magnificencia de su poderío como raza
magnífica.
En todas las
puertas de las grandes estructuras levantadas, motivo de orgullo y dominación,
se grababan coronas de distintas hechuras y tamaños, dependiendo del tipo de
lugar que sea. Siendo las colocadas en los puntos más estratégicos, como el
juzgado o el castillo imperial, grandes coronas adornadas de líneas de oro,
diamantes y platino.
Todas las
razas tenían un único dibujo representando a toda la comunidad, su grandeza y
poder talladas en sus más importantes estructuras.
Así, los
Ángeles gozaban en su próspero reino de estructuras aladas con delineado
platino sobre piedra de mármol. Los Lycans u hombres lobo tenían en sus
dominios estatuas hechas de onyx , hermosos lobos negros perfectamente
esculpidos que eran guardianes de los distintos clanes, estando los más voluminosos
en el centro del recinto donde se hospedaban los guerreros y los líderes del
clan. Los hechiceros mantenían a cada lado de sus ciudades pilares con una
esfera de rubí y esmeraldas colocadas opuestamente para una mayor protección y
amplificación de sus poderes. Los humanos por su parte, mantenían espadas
cruzadas y siluetas de caballos tallados en sus centros ceremoniales.
Lo que
caracterizaba a los demonios, eran tallados de grilletes en los lugares donde
se mantenían.
Nakajima: -¡Exijo
saber por qué razón han dado esa orden! –gritó azotando las manos empuñada
contra el escritorio del director. -¿Acaso no Ryosuke también pertenece a esta
escuela? ¿Entonces por qué no importaba si aquel demonio le hacía algo?-
Director:
-Nunca dije eso… Los demonios nunca dejan a una víctima o a un rehén con vida,
si le dejábamos escapar sería un final aún peor para Yamada-kun. Nosotros
queríamos aminorar ese sufrimiento, sin embargo, no pudimos hacer nada para
evitarlo- gimió con pesadez, como si aquello le doliera en verdad- No creo que
nuestro pequeño Yamada-kun regrese…- susurró, desviando la mirada hacia un
lado, mostrando con ésta los papeles del vampiro menor sobre su escritorio,
como si estuviese a punto de dejar archivado su nombre junto a los “sin
terminar”.
Nakajima: -No…-
Crujió los dientes y lanzó los papeles al aire, logrando captar la mirada
molesta del director- ¡NO ES CIERTO!-.
Director:
-¡No hay más que hacer! Ahora si me disculpas… Debo papeles que ordenar-
contestó calmadamente, levantándose de su asiento y llamando a la secretaria
para sacar al intruso de su oficina.
Aún con los
reclamos que el chico lanzaba, no eran escuchados por nadie… Por nadie excepto
por la persona que a su lado se encontraba y que había sido invisible desde
hace un rato para Nakajima, Chinen.
Chinen: -Yuto…-
susurró, colocando una mano sobre el hombro del desdichado que ahora lloraba
hincado frente a la puerta.
Nakajima:
-Por qué… ¿Por qué nadie quiere ir por él? Yamada no está muerto… Yamada no
morirá por algo como esto… Su cuerpo no cayó, no escuché su corazón detenerse…
sé que está vivo… lo siento… puedo sentir que… está en peligro…-
--------
En cuanto su
cabeza giró lentamente al escuchar unos murmullos, su vista se vio nublada por
siluetas borrosas que poco a poco se aglomeraban alrededor de su persona. ¿En
dónde se encontraba? No supo reaccionar demasiado rápido, solo sintió su cuerpo
ser arrastrado y empujado a una especie de puerta subterránea, de la cual, al
voltear hacia arriba, observó los últimos instantes de luz antes de hundirse en
la completa oscuridad.
----------
Las puertas
fueron abiertas con una fuerza tan tremenda que hizo levantar polvo por el
impacto del viento sobre toda la habitación. Pasos sonoros se hicieron
escuchar.
Yaotome:
-¡DAIKI! ¡CONTÉSTAME! ¿Qué demonios hacías en aquel internado usando tus
habilidades sin en anillo?-
Arioka:
-¡Nada!- contestó molesto, buscando entre sus cosas una especie de objeto.
Yaotome: -¡TE
DIJE QUE NO VOLVERÍAS ALLÍ! ¿Acaso piensas desobedecerme siempre?- pero fue
totalmente ignorado por el menor- ¡DAIKI!- y molesto, le tomó del brazo para
hacerlo girar, siendo sorprendido por la reacción que éste tomó.
Arioka:
-¡Déjame!- se zafó del agarre, viéndole con cierto desafío y rencor en los
ojos. Nunca, pero nunca antes había desafiado o si quiera intentado regresarle
alguno de los reclamos al líder del grupo.
El mayor de
los demonios se mantenía distante ante esa pelea, viendo a través de la puerta
como si vigilara o buscara algo que le incomodara en la rendija que se había
formado al ser (o intentar ser) cerrada.
Yaotome:
-Daiki…- afiló la mirada y su paciencia se agotó. Su puño se cerró y finalmente
quedó estampado en la mejilla derecha del menor, quien al impacto, solo retrocedió
unos pasos colocando su diestra al instante sobre su rostro. –Nunca… Nunca me
contradigas… ¿Lo has entendido? Tú no eres más que un simple aprendiz mío. Si
quieres seguir en la posición en la que estás, arriba de todo demonio de
pacotilla que pueda ser traído a este estúpido lugar, será mejor que me
obedezcas sin reservas... Si quieres seguir “vivo”, no vuelvas a hacer
estupideces como ésta.-
Arioka:
-Nunca quise seguir vivo…- susurró, alzando la vista y clavándola firmemente
sobre el mayor. – Nunca quise ser parte de tu estúpido séquito… No me trates
como tu maldito y puto objeto. No lo soy- terminó por decir, tomando su postura
recta.
Yaotome:
-¿Séquito? –Sonrió burlón, carcajeándose un segundo y cruzando sus brazos-
Nunca te traté de séquito… ¿Qué no lo ves? Incluso Takaki lo ha comprendido…
¿Tan idiota estás que no has captado verdaderamente tu posición?- resopló con
la nariz.
Arioka:
-Claro que la sé… Soy un mero juguete para ustedes dos. Una maldita puta de
quien gozan hacerle todo tipo de juegos obscenos, sexuales, lujuriosos… Solo
sirvo para satisfacer su mugre deseo en este maldito infierno… ¿Crees que eso
es vida? No lo es… ¡NO LO ES!-
Yaotome: -Es
lo que nos tocó vivir… - se dio la vuelta restando importancia a la discusión absurda
–Vamos, se nos hace tarde Takaki. Ya tenemos que entrar en la arena.-
Takaki: -Si…-
Apenas pronunció, abriendo la puerta a su paso antes de salir.
Arioka: -Los
odio…- su voz apenas audible logró detener el andar de ambos demonios,
girándose Takaki para observar de reojo aquello. –Los odio… Los odio… Los odio…
Los odio…- Sus alaridos poco a poco se transformaron en sollozos silenciosos
que dejaban escapar lágrimas amargas por sus mejillas. El significado de
aquello, era claro. Tanto era su desprecio que estaba cansado de ocultarlo.
Nunca antes había llorado frente a ellos, nunca quiso demostrar esa parte suya
tan vulnerable. Frío, distante, y sin embargo, el demonio con más corazón que
podría existir detrás de la prisión en la que estaba confinado.
Yaotome: -No
me importa que me odies…- fueron sus últimas palabras antes de seguir su
camino.- No es como si quisiera ser querido por ti.-
Y salió de la
habitación cerrando con fuerza las puertas tras de sí.
Takaki: -Hika…-
susurró, viéndole.
Yaotome: -Es
hora de comenzar el show- sonrió, siguiendo de largo sin detenerse. -¿No
querías ya tu turba eufórica lista? El mayor evento está por comenzar y si no
nos apresuramos, perderás tu lugar en las tribunas.-
Takaki:
-Nunca dije que me quedaría en las tribunas.-
Yaotome:
-¿Participarás? Que extraño… Creí que solo te gustaba observar, hace ya tiempo
que no jugabas…-
Takaki: -Hace
tiempo… - sonrió, recordando el momento exacto en el cual había dejado de
jugar- ¿Cuándo te ayudé a ganar?-
Yaotome: -No
hables de eso… Mi garganta se amarga cada vez que lo mencionas- susurró,
haciendo una expresión de asco- No me lo recuerdes.-
Takaki: -No
lo haré…- terminó por decir antes de que ambos ingresaran a aquella locación
oculta a la vista de todos.
Mientras
tanto, a sus espaldas, habían dejado detrás de la puerta, a un demonio con las
rodillas debilitadas y que poco a poco se flexionaron hasta caer bruscamente sobre
el suelo.
Los sollozos
del demonio al final se convirtieron en llanto y luego en gritos. Alaridos que
destrozaron en parte su garganta y que dejaron desahogar lo que por tanto
tiempo ocultó.
Se sentía…
Liberado.
-------
Las luces del
centro fueron encendidas. La silueta de alguien surgiendo desde abajo
finalmente cobró forma dejando ver al anfitrión del siguiente juego brutal.
Yaotome:
-¡MALDITA ORDA DE MAL NACIDOS!- anunció por el altavoz, siendo respondido por
gritos, bulla y golpeteos con pies y manos en rejas y suelo.- ¡¿LISTOS PARA SU
PUTA DIVERSIÓN NAUSEABUNDA Y NEFASTA?!- se giró un poco, dirigiéndose a tantos
lados como había en aquel coliseo circular.- Todos los participantes están ya
acomodados en sus celdas de inicio… Dentro de poco dará inicio a la carrera más
esperada por todos. ¡EL EVENTO DE CIERRE DE ESTA FERIA DE PÚTRIDOS MALNACIDOS!-
La bulla
acrecentaba su ruido. Las masas revoloteaban en los bancos y pedían ya iniciar
con el juego, mientras los participantes eran preparados en la parte baja de la
tribuna.
Yaotome: -¡Ya
que todo está preparado, pasemos a lo siguiente!- elevó su mano apuntando hacia
la parte superior de un montículo al centro de la arena -¡EL PREMIO SERÁ…
DAMNIO!- su voz ahora sonaba como el presentador de una subasta.
Sin embargo,
el premio que apenas ascendía, no era el anunciado.
Un demonio
entró corriendo a la arena, entregando un papel al presentador y retirándose
enseguida si no quería ser partícipe de aquel juego tan voraz.
Yaotome:
-Parece que ha habido un error- frunció el ceño extrañado y molesto, pues nadie
le había avisado con anterioridad sobre ello.- Veamos quien es el premio ahora-
aclaró la garganta y comenzó a leer el papel –El permio es… ¡¿QUÉ?!-
------
En el medio
del cuarto, su cuerpo yacía recostado sobre el suelo, encorvando la espalda y
abrazando sus piernas manteniendo una posición fetal. Sus ojos derramaban
lágrimas pero su voz ya no era escuchada. Inclusive podía notarse la calma y
serenidad en su rosto. Sus labios dibujaron una especie de sonrisa al darse
cuenta de su estado patético, elevando su mano para retirar las lágrimas
sobrantes.
Arioka: -Que
idiota…- se dijo a sí, levantándose por fin y sacudiendo un poco su cuerpo.
No quería
quedarse en su habitación. Necesitaba despejarse, y el patio serviría al menos
para eso.
Sabía que
todos estarían abajo, lo que le dejaba toda la tranquilidad del mundo en el
único lugar verdoso y lleno de vida que podía degustar para sí solo.
Más, al abrir
la puerta y avanzar apenas unos cuantos pasos, algo lo inquietó. Una esencia
fría recorrió sobre su cuerpo. Un escalofrío que lo perturbó en sus pasos y le
hicieron retroceder un poco. Algo no estaba bien, y lo podía sentir.
Aquel latido
incontrolado en su pecho le anunciaban algo… Y entonces, la imagen del vampiro
se hizo presente como un fugaz recuerdo distante que se alejaba poco a poco en
dirección a la puerta que tanto temía volver a abrir.
Su cuerpo
tembló, su boca se secó y sus ojos no dejaban de ver a través de pasillos,
paredes y más puertas la imagen de aquella enorme entrada que daban origen a
sus pesadillas.
Odiaba esa
sensación de impotencia, de miedo y de asco que lo invadían cada que su vista
se dirigía siquiera a esa dirección. Pero algo más fuerte que ello le atraía
hacia ahí, y entonces lo pudo descubrir.
Como si sus
ojos atravesaran todo tipo de material, logró observar la silueta de la persona
que menos deseaba ver atada en el centro del arenal.
--------
Yaotome: -¡¿Dónde
rayos lo sacaron?!- preguntó molesto a quien antes había entregado la hoja.
Demonio: -No
lo sé… Me han pedido que te la pase. Según tengo entendido lo encontraron en
los jardines laterales.-
Yaotome:
-¡¡¿Y qué rayos hacía un estúpido vampiro tirado ahí?!!-
Demonio: -¡No
lo sé! Tal vez se cayó de un acantilado, lo tiraron ahí, lo dejaron abandonado…
¡Cualquier cosa pudo ser! ¡No me
preguntes a mí!-
Yaotome: -Nos
meteremos en problemas si lo dejamos…-
Demonio: -Ya
han hablado con los perros y los putos han dicho que no hay problema. Si estaba
en el perímetro, que se joda por puto.-
Yaotome:
-Gracias…- desvió la mirada y se dirigió al centro de la arena, retomando su
anuncio y sonriendo. -¡EL PREMIO SERÁ UN VAMPIRO!-
La bulla pasó
de molesta y ansiosa, a eufórica.
Yaotome: -¡YA
SABEN LAS REGLAS! Quien logre alcanzar al premio en el centro de la arena,
podrá ser el ganador de tal suculento premio… ¿Y saben una cosa? ¡¡ESTE VAMPIRO
ES TOTAL Y ENTERAMENTE VIRGEN!! ¿No tiene ganas de meter su navaja en aquel
pequeño hoyo estrecho? ¡¡ABRANCE CAMINO EN SU INTERIOR Y DEJEN PLASMADO SU
DOMINIO EN ÉL!-
--------
Al abrir
finalmente los ojos, lo único que pudo distinguir fue… peligro.
--------
Las cosas se
ponen peligrosas. Los demonios son criaturas temibles, despiadadas, sin
escrúpulos ni pizca de moral. Nada ni nadie está a salvo. Solamente ellos saben
lo que hacen y están conscientes de sus acciones. ¿Sabrá Ryosuke el peligro que
le espera?
¡Esperen con
entusiasmo la continuación! Poco a poco esto se pone interesante.
CONTINUARÁ
POR KAMIIIII!!!!!!
ResponderEliminarVAN A VIOLAR A YAMADA!!!!???
DAIKI DONDE CARAJOS ANDASSSS!!!!
asdadasdasd conti
jajaja bueno, daiki está intentando ver a través de la puerta que tanto le asusta (?)...
Eliminarjajaja xDD si! intentaré hacer la conti lo más pronto posible! como dije, es la parte que más me gusta *A* así que espero no pasar del sábado siguiente D:!!
Siento ser tan lenta TTwTT
Gracias por la notita <3 <3
no es nada... tenias tiempo sin seguir este... y... u.u yo me fui por otros lares llenando mi vacio (?) xD
Eliminarpero es bueno que sigas :3 me muero por saber!?